Estrechez de vías provoca accidentes de tránsito

 

Por: María Hernández

En la actualidad  se mantiene la costumbre de construir vías con pocos carriles, en algunos casos dos, en ambas direcciones y las infraestructuras viales que desde su construcción adolecen de esa falla se encuentran en una situación peor porque a muchas de ellas se les ha eliminado una parte importante de sus carriles con obstáculos en  calles y avenidas  con los que se pretende eficientizar el tránsito, pero lo que hacen  obstruirlo con pilotillos, muros, conos y otros.

La información la publica Vanguardia del Pueblo en su portal https://vanguardiadelpueblo.do/2021/08/estrechez-de-vias-provoca-accidentes-de-transito/ y la destaca TiempoNotiRD.

El caso más reciente es el de la avenida Bolívar a la cual se le ha cercenado una parte para la implementación de la nueva Ciclovía, la cual es poco usada por los ciclistas, como fue concebida y que ha provocado numerosos accidentes por lo que los conductores reclaman, por diferentes medios, la eliminación de los bloques o pilotillos que dividen en dos la transitada vía.

Cuando se recorre diferentes provincias del territorio nacional se confirma que son pocas las carreteras que tienen más de dos carriles, ni siquiera la muy mencionada carretera Santo Domingo- Samaná que se dice está hecha con los estándares más modernos en cuanto a infraestructuras de carreteras.

Si esa vía tuviera por lo menos 4 carriles, dos de ida  y dos de vuelta habría más posibilidad de que los conductores se pudieran defender ante cualquier rose o rebase que se produzca. 

Recientemente, en la autovía de Samaná se produjo un aparatoso accidente de tránsito en el cual murió una persona y otras 18 resultaron heridas, cuando un autobús de 32 pasajeros y una yipeta chocaron en el cruce de Cabreto y Naranjal de Yamasá, uno de los puntos más peligrosos de  la angosta carretera a lo que se suma la presencia constante de animales.

Debe tenerse en cuenta no solo lo bella que se vea una vía sino  lo práctica que pudiera resultar. La Recta de Azua, con 13 kilómetros de longitud es muy hermosa, pero hay una zona en la que se producen muchos accidentes de tránsito, en el área próxima a la nueva cementera.

En la capital, la avenida San Martín, aunque es en una sola dirección,  ya resulta muy estrecha para la gran cantidad de vehículos que hacen uso de la comercial vía por lo que sería recomendable estudiar la posibilidad de ampliar la transitada avenida.

Otra calle muy utilizada y que sirve de desahogo a grandes vías es la Santiago, en Gascue, la cual es utilizada por conductores privados, básicamente, para llegar de forma rápida a la Máximo Gómez, la Bolívar, el Parque Independencia, y otros lugares.

La avenida Máximo Gómez tiene 4 carriles (dos a cada lado) de ida y vuelta, pero resulta muy estrecha para el gran flujo de vehículos que transita por el lugar, especialmente vehículos pesados que suben y bajan por la activa vía de comunicación.

En el municipio Santo Domingo Este, la carretera Mella, desde la avenida Sabana Larga hasta la San Vicente de Paúl es un verdadero caos por la gran cantidad de vehículos públicos y privados que se desplazan por esa vía que tiene 4 carriles , dos a cada lado, en ambas direcciones.

En la misma zona oriental, la posibilidad de que se produzca un accidente es mayor cuando se trata de la vía de un elevado, como el que conduce al Hipódromo, en el kilómetro 14 de Las Américas, el cual solamente tiene dos carriles, uno para subir y otro para bajar, además del deterioro que presenta en los bordes del puente que ya están destruidos por el salitre, por su cercanía al mar, sin que las autoridades del Ministerio de Obras Públicas vayan a repararlo.

También se encuentra dentro de las vías estrechas la transitada avenida Tiradentes que cuenta con 4 carriles a cada lado, pero que aglomera a una gran cantidad de vehículos que hacen que resulte pequeña para los conductores.

Las calles y las avenidas de Santo Domingo han quedado estrechas y no dan abasto para la gran cantidad de vehículos que circulan cada día por esta urbe que cuenta con movilidad limitada, pues menos del 17 por ciento del área está destinado a las calles y las aceras lo que es una proporción que está por debajo del 35 por ciento que recomienda ONU- Hábitat.

Las ciudades en la República Dominicana han crecido y el parque vehicular también. Sería importante que el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTRANT), conjuntamente con las demás autoridades que tienen que ver con el tránsito, estudien  la posibilidad de supervisar las mencionadas vías y ver si se pueden reestructurar o cambiar de dirección en un solo sentido con lo que se evitarían accidentes viales  lamentables.