Lo primero que tenemos que tener
presente a la hora de analizar las virtudes y los desaciertos del confinamiento
obligatorio que se vive en la República Dominicana y en muchos países del mundo
por la pandemia del coronavirus es el papel que juega en este período el cuerpo
físico y mental de los individuos.
La información la publican el
periódico El Nuevo Diario y Vanguardia del Pueblo en su formato digital y la
resalta TiempoNotiRD.
A
más de dos meses de encierro, nos hemos acostumbrado a la cotidianidad de lo
que hacemos. Cada uno desde su perspectiva. Unos trabajando desde la casa y
otros para los que su confinamiento ha terminado porque han comenzado a
trabajar, en esta segunda fase, otros todavía suspendidos y muchos cancelados,
lamentablemente.
El
éxito en el confinamiento para los que trabajamos desde la casa consiste en
mantener la rutina diaria que llevaríamos a cabo si tuviéramos que salir a la
calle a trabajar. Continuar el mismo horario de levantarse y de ir a dormir.
Primero el baño, la vestimenta, no es bueno que trabajemos en bata o en
calzoncillos. Hay que peinarse, muchos se han olvidado de hacerlo, hombres y
mujeres.
Desayunar a su hora, almorzar y
cenar dentro de los mismos horarios que lo haría si estuviéramos en el trabajo.
No abusar del cuerpo porque estemos en casa, pasando hambre o
sobrealimentándolo. Recordemos que una dieta balanceada y rica en vegetales,
cereales y proteínas es lo más recomendable, de acuerdo a los nutricionistas.
Dejar de lado los aderezos que ponen buena la comida, pero que le hacen mucho
daño al organismo.
Controlar
en el hogar el uso de los medios tecnológicos, sobre todo cuando son utilizados
por niños, para los que no parece finalizar su uso. Si vamos a salir a alguna
diligencia en horas de la tarde recordar que el toque de queda comienza a las
7:00, de lunes a sábado y el domingo a las 5:00 de la tarde.
De
acuerdo a los expertos en el tema, luego de semanas de confinamiento en la casa
debido al COVID-19 llega el momento de volver a realizar ejercicios en las
calles, por lo que estas actividades físicas se deben hacer de manera gradual y
no querer comenzar como si estuvieras en todo momento ejercitándote, con la
misma intensidad, sino poco a poco para evitar complicaciones en la salud.
El
ejercicio debe practicarse de manera segura y también higiénica, como
recomiendan nuestras autoridades de salud, para lograr reducir los riesgos de
infección.
Este
ejercicio debe ser beneficioso tanto para nuestra salud física como mental,
luego de un estado de confinamiento tan largo y que aún no se sabe el tiempo
que pudiera prolongarse. Dependerá mucho de cómo nos manejemos en la
actualidad, en nuestro hogar y en el entorno.
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