Alcaldia de Santiago

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jueves, 2 de diciembre de 2021

Cunetas al descubierto provocan accidentes de tránsito

 

Por: María Hernández



Las carreteras de la República Dominicana, en su mayoría, deben someterse a una revisión constante debido a que el urbanismo se ha ido apoderando de muchas regiones en las que quizás nunca se pensó que en la actualidad estarían tan pobladas.

La información la publica Vanguardia del Pueblo  https://vanguardiadelpueblo.do/2021/11/cunetas-al-descubierto-provocan-accidentes-de-transito/      y la destaca TiempoNotiRD.

Erigir una infraestructura vial no se limita a la construcción de la misma y se debe mantener una supervisión constante para verificar cuáles cosas han cambiado en el entorno de la edificación de la vía con el fin de poder identificar los posibles problemas que afectan las condiciones de seguridad de la carretera.



También se deben identificar los puntos de más alta concentración de accidentes o puntos negros para intervenir esos tramos y reducir los accidentes que se producen en esos entornos. Debe terminar la peligrosidad de muchas vías que por años ha dejado decesos o lesionados en miles de dominicanos y extranjeros en avenidas de áreas urbanas y rurales.

Este domingo ( 29-11-2021 ) pudimos observar la deprimente escena de una señora con un bebé en brazos en una zona rural de la autopista Duarte, a la altura de Bonao, esperando a que algún buen samaritano se detuviera y le obstruyera el paso a los demás vehículos para que ella pudiera pasar y ni si quiera porque el tránsito estaba prácticamente  detenido, por un tapón, le dieron oportunidad de pasar. Todos seguían su tránsito sin pensar en la señora, que no sabemos cuánto tiempo tuvo que esperar para poder cruzar al otro lado de la vía. Lo peor de todo es que esa persona estaba a orillas de la carretera, junto a una cuneta en reparación, la cual no tenía ningún tipo de señalización o iluminación, en medio de una oscuridad indescriptible.

Entendemos que las cunetas son una forma de desplazar las aguas en tiempos de lluvia, pero la forma en que las construyen, cuando son abiertas, ponen en peligro la vida de los conductores y de las personas que se desplacen por el lugar. Las cunetas son Zanjas abiertas en el terreno, revestidas o no, que recogen y canalizan las aguas superficiales.



A pesar de que sabemos que el gasto será  mayor, estas cunetas deberían estar tapadas con una especie de parrilla alternada con otra parte encementada de forma que pueda servir de acera a los ciudadanos que residen en esas zonas que al momento de construirse la carretera estaba deshabitada.

El caso de la avenida Marginal de Las Américas no lo entendemos. Esta vía cuenta con aceras acompañadas de unas cunetas al descubierto que cuando llueve recoge toda la basura del lugar, botellas plásticas, fundas, vasos y platos desechables, ramas, tubos, tierra, entre otros. Es un desastre. Recientemente la estaban limpiando y todos esos desperdicios se mantuvieron por semanas encima de las aceras, por lo que las personas tenían que bajar a los contenes. Si cubrieran esa parte de la cuneta como hicieron frente al supermercado que está en el kilómetro 10 de esa avenida, la problemática mejoraría.

Cuando la cuneta está en el centro de la vía, en vez de dejar esa franja al descubierto pudieran aprovechar esa área para hacer algún mirador con sus respectivas mallas o barreras de protección y sus alcantarillas para la recolección de las aguas. Las dimensiones de las cunetas  son calculadas para transportar las aguas tanto de calzadas como de laderas.



En el área de la carretera donde se encuentra la cuneta , por lo regular no hay aceras y los conductores deben recordar que en esos casos la velocidad a la que debe manejarse en una vía sin aceras no debe superar los 20 kilómetros por hora.

El nombre que recibe el agua que corre por la cuneta la cual fluye sobre la plataforma de la carretera y que es aportada tanto por los taludes superiores adyacentes como por el escurrimiento local se denomina drenaje longitudinal. Ese flujo tiene que ser encauzado de forma tal que no se produzcan daños a las carreteras ni afecte su transitabilidad.

Aunque las obras viales son diseñadas para durar una vida útil, es decir,  el tiempo en años que debe permanecer lo que es la plataforma de la carretera y todas sus obras accesorias o las denominadas obras de arte, en servicio y sin ninguna falla, aunque algunas carreteras de reciente terminación, en nuestro país, presentan fallas en muchos tramos de las vías, como el socavón que se produjo hace unos días en el kilómetro 13 de la autopista Duarte.

En 2018 el Ministerio de Obras Públicas informó que la red nacional del sistema vial posee 5,514 kilómetros de carreteras, 8,672 kms de caminos vecinales; 5,519 kms de caminos temporales y/o terracerías, conjuntamente con 1,071 puentes.

Mientras, de acuerdo al Foro Económico Mundial en su informe Global de Competitividad 2013-2014 la República Dominicana ocupaba el quinto lugar entre los países de América Latina con una mejor infraestructura vial. El pasado año 2020  el medio periodístico El Dinero resaltaba, en primera plana, que nuestro país ocupa el primer lugar de toda la región en ese importante renglón de la construcción.

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